Una de las paredes del despacho está recubierta de cristales de sal, lo que aporta a la estancia un ambiente único. Durante el tratamiento se respira aire sano, saturado de microelementos y minerales, lo que contribuye a mejorar su bienestar y fortalecer la inmunidad del organismo. La sal liberada tiene un efecto beneficioso sobre el organismo, mejora el estado de ánimo, alivia el estrés y la fatiga y favorece el tratamiento de muchas dolencias de salud.